ES2271310T3

ES2271310T3 - Grapa de sujecion para unir elementos constructivos de madera.

Info

Publication number: ES2271310T3
Application number: ES02754861T
Authority: ES
Inventors: Dieter Reif; Joachim Bader
Original assignee: Braun and Wurfele GmbH and Co
Current assignee: Braun and Wurfele GmbH and Co
Priority date: 2001-07-16
Filing date: 2002-07-10
Publication date: 2007-04-16
Anticipated expiration: 2022-07-10
Also published as: WO2003009138A3; AU2002321200A1; EP1407357A2; US7251918B2; JP4077791B2; WO2003009138A8; AU2002321200A8; WO2003009138A2; CA2453656C; ATE340385T1; US20040237463A1; CA2453656A1; DE10230797A1; JP2005508463A; CN1545598A; DE10230797C2; EP1407357B1; CN1328445C

Abstract

Grapa de sujeción para unir elementos constructivos de madera entre sí y a un subsuelo, en especial tablones de recubrimientos de balcón y terraza, preferentemente al aire libre, con - un nervio vertical (5), - al menos un clavo (6, 6'', 7, 7'') afilado en forma de lengüeta que sobresale respectivamente en vertical/horizontal en la parte superior, a ambos lados del nervio, - así como placas angulares (8, 8'') que sobresalen en vertical/horizontal en la parte inferior, a ambos lados del nervio, caracterizada porque - la grapa (1, 15, 18, 20, 35, 42) de sujeción es un angular doble compuesto de dos perfiles en L (2, 2''), - el nervio (5) es un nervio doble compuesto de dos lados perfilados (3, 3''), y en al menos una de las dos placas angulares (8, 8'') está previsto al menos un taladro (9, 9'') de sujeción.

Description

Grapa de sujeción para unir elementos constructivos de madera.

Campo de la técnica

La invención se refiere a una grapa de sujeción para unir elementos constructivos de madera entre sí y a un subsuelo, especialmente tablones de recubrimientos de balcón y terraza al aire libre, con un nervio vertical, al menos un clavo afilado en forma de lengüeta que sobresale respectivamente en vertical/horizontal en la parte superior, a ambos lados del nervio, así como placas angulares que sobresalen en vertical/horizontal en la parte inferior, a ambos lados del nervio, según el preámbulo de la reivindicación 1 (véase, por ejemplo, el documento US-PS-2116737).

Estado de la técnica

Ya se conocen las uniones de elementos de madera con el objetivo de sujetar al aire libre dos tablones paralelos a un subsuelo de modo que entre los tablones quede, por una parte, un espacio de aire y una zona para trabajar la madera y entre el subsuelo y los tablones quede también, por la otra parte, un espacio de aire para la circulación del aire y como medida contra la pudrición de la madera. En la práctica habitual, un listón distanciador se encaja en dirección longitudinal entre los tablones y como apoyo debajo de los tablones se colocan segmentos estrechos de listones. La sujeción se realiza con tornillos que fijan verticalmente los tablones a través de los segmentos de listones de apoyo en el subsuelo. Los listones distanciadores se quitan a continuación. Aparte de que los tornillos de los tablones taladrados son visibles desde arriba, la superficie de la madera está rota con frecuencia, formándose, por tanto, grietas y astillas sobresalientes. A través de los orificios penetra la humedad que daña la madera. Los niños, que corren descalzos, se pueden herir levemente con las astillas y la intemperie provoca decoloraciones alrededor de los orificios que empeora aún más la ya fea estética de los tornillos. Por último, en caso de tablones largos se producen ensanchamientos en la madera alrededor de los tornillos, mientras la madera y el subsuelo presenten coeficientes distintos de dilatación longitudinal. No obstante, este método aún se aplica ampliamente, ya que es el único que garantiza espacios suficientes de ventilación y, por tanto, una buena circulación del aire, así como permite una gran longitud del clavo. En este caso resultan habituales una distancia entre juntas y una distancia del suelo de aproximadamente 5 mm como mínimo.

Del documento US-PS2116737 anteriormente mencionado se conoce un sistema de unión, mediante el que las tablas provistas de ranura y lengüeta se fijan entre sí y en un subsuelo. A tal efecto se usa una grapa de sujeción, cuyo nervio vertical presenta en el lado superior tres clavos en forma de garra que sobresalen verticalmente y penetran en las superficies de los tablones. En el lado inferior del nervio están previstas dos placas angulares, dobladas en vertical, que presentan respectivamente la longitud media aproximada del nervio y están dobladas en direcciones opuestas (hacia la izquierda/hacia la derecha). Para mantener la distancia y la sujeción en el subsuelo está montado un carril en U que se puede atornillar en el subsuelo y sujeta fijamente las grapas mediante bordes laterales del nervio, apoyándose los tablones en los lados del carril. De este modo no existe ningún contacto directo de las grapas con la superficie a unir y para el montaje hay que colocar las piezas de forma oblicua con el fin de lograr a continuación una sujeción bajo tensión, siendo imposible colocar en vertical la pieza con una herramienta simple, por ejemplo, un martillo. Además, las garras relativamente cortas están diseñadas de forma ancha y puntiaguda, de modo que en la madera se produce, por una parte, una presión dinámica y, por la otra parte, un efecto de cuña, que pueden provocar la aparición de grietas. Asimismo, las garras están conformadas como continuación del lado superior del nervio, por lo que se tiene que usar una tira de chapa con una longitud convenientemente mayor. Mediante estas grapas conocidas no está prevista finalmente ninguna separación entre las tablas, por lo que es imposible la circulación del aire y no se tiene en cuenta la contracción, de modo que estas grapas no son adecuadas para el exterior.

Del documento US-PS2066813 se conoce un elemento de unión, construido de forma similar a la grapa descrita antes y que debido a placas angulares más largas tiene superficies de apoyo que posibilitan una colocación más fácil de los tableros y presentan, además, un orificio de sujeción. Estas grapas de unión están diseñadas para sujetar tableros de revestimiento de pared, como tableros de fibras y corcho, mediante clavos de garra de tipo cortante con una estabilidad menor, que no son adecuados para la madera. No se necesita ni tampoco se desea un elemento distanciador, ya que estas grapas no se pueden usar por este motivo en el exterior.

Del documento US-PS441227 se conoce finalmente un elemento de unión que se puede usar en la creación de uniones angulares de cajas. La grapa está fabricada en este caso a partir de una cinta metálica, de la que se recorta un elemento angular en forma de lengüeta como nervio vertical y se dobla verticalmente hacia arriba. Además, en la placa y en el nervio están conformadas hacia fuera tres lengüetas angulares como clavos que se encajan por el lado plano en las tablas a unir. Estas conocidas grapas no son adecuadas para una unión frontal, no visible desde el exterior.

Objetivo técnico

El objetivo de la invención es poner a disposición una grapa de sujeción del género mencionado arriba que represente un elemento económico de unión, resulte adecuada de forma óptima para un montaje seguro de tablones de madera al aire libre, con los espacios correspondientes de ventilación, y soporte la alta resistencia al montaje a presión de la madera dura y la termomadera, sin provocar grietas ni astillas en la madera.

Exposición de la invención y sus ventajas

Este objetivo se consigue mediante una grapa de sujeción del género mencionado arriba al ser la grapa de sujeción un angular doble compuesto de dos perfiles en L, al ser el nervio un nervio doble compuesto de dos lados perfilados y al estar previsto al menos un taladro de sujeción en al menos una de las placas angulares. En las reivindicaciones subordinadas están caracterizadas configuraciones ventajosas.

Por consiguiente, la grapa de sujeción es un angular doble compuesto de dos perfiles en L y presenta una sección transversal básicamente en forma de T invertida u horizontal. La pared doble del nervio tiene también la ventaja de proporcionar una elevada resistencia del nervio y un apoyo de los clavos de una parte de la pared mediante la otra parte de la pared, sobre todo, al clavar las grapas o clavos. En este caso, el nervio es un nervio doble, o sea, tiene doble pared, y está formado por dos lados perfilados, de modo que la distancia entre los tablones tiene al menos el espesor doble de la chapa. Además, en al menos una de las dos placas angulares está previsto al menos un taladro de sujeción, mediante el que se pueden fijar las grapas y, por tanto, los tablones en el subsuelo.

Los lados perfilados, que forman el nervio doble, pueden ser naturalmente también lados dobles si al doblarse el recorte de chapa para crear el perfil en L, se duplica respectivamente el lado, que sirve como pared del nervio doble al ensamblarse los perfiles, mediante el doblado correspondiente de una tira de material, pudiéndose lograr en general, por ejemplo, un nervio cuádruple. La pared de refuerzo o separación, doblada hacia dentro, puede rellenar toda la longitud del nervio y la altura del nervio, pero también puede consistir sólo en al menos una tira longitudinal corta, preferentemente en el tercio superior del nervio, o en varios nervios trasversales paralelos, previstos preferentemente a la altura o en la zona del clavo del otro perfil para poder soportar de forma óptima la contrapresión al introducirse a presión el clavo.

Resulta ventajoso si el angular doble de la grapa está hecho a partir de dos perfiles angulares en L, unidos respectivamente con un lado perfilado de forma plana entre sí, para crear un perfil en T, mediante soldadura, remachado o machihembrado. A tal efecto, se pueden unir fácilmente chapas angulares, dobladas en L, a partir de tiras correspondientes de chapa para crear una placa angular doble, siendo posible aquí también el uso de perfiles convencionales.

Es especialmente ventajoso, si la grapa angular doble está conformada mediante la técnica de doblado a partir de una tira continua de metal, o sea, de una pieza. El nervio doble, doblado en el centro en la placa de chapa, no requiere ningún otro preparativo para la unión.

Asimismo, es ventajoso, si los clavos en forma de lengüeta están dispuestos cerca del extremo superior del nervio y cortados directamente del material del nervio, así como doblados verticalmente hacia fuera, de modo que no se ha de prever ninguna anchura adicional del material para cortar y conformar clavos en forma de garras, como ocurre en el caso de las grapas conocidas. Simultáneamente, los clavos, doblados hacia fuera a partir de las paredes del nervio doble, se pueden apoyar mediante la pared situada detrás en cada caso o introducir a presión en la madera mediante ésta.

Los clavos de sujeción, situados a ambos lados del nervio doble, están configurados y dispuestos aquí ventajosamente de modo que en cada lado del nervio sólo está previsto preferentemente un clavo y éste puede estar colocado en el centro respecto a la extensión longitudinal del nervio o descentrado respecto a la dirección longitudinal, por ejemplo, en el comienzo de la cuarta parte exterior del nervio respectivamente. En este caso, los dos clavos, que sobresalen libremente en vertical, pero en sentido contrario, de ambas superficies del nervio, así como las grapas en general, según se explica más adelante, están desplazados con simetría lateral respecto a un punto de simetría dispuesto en el centro del nervio, o sea, los lados de la grapa son idénticos respectivamente en caso de un desplazamiento de 180º de la grapa. Mediante esta simetría del punto no hay que orientar especialmente la grapa durante el montaje, por lo que se puede pensar en una automatización del montaje, en la que es posible alimentar automáticamente las grapas y montarlas con un dispositivo de presión por impacto o aire comprimido.

En este caso, los clavos pueden estar doblados hacia fuera, a partir del nervio doble, horizontal o verticalmente, es decir, en sentido paralelo o perpendicular a las placas angulares. En las grapas con nervio más bajo será más ventajoso doblar hacia fuera los clavos en sentido horizontal, o sea, en paralelo, preferentemente de dentro hacia fuera. En nervios más altos, o sea, nervios con una altura mayor que la longitud del clavo, el clavo puede estar previsto ventajosamente en dirección vertical, a saber, presionado hacia arriba. Si el clavo de sujeción está curvado ventajosamente en forma de canal o arco abierto hacia abajo, incluso en la base del clavo, y se estrecha hacia la punta hasta presentar un pequeño radio en la punta, la forma descendiente del clavo recuerda la parte superior del pico de un pájaro. Por tanto, la forma del clavo está tomada prácticamente de la naturaleza y es extremadamente resistente a la flexión por toda su longitud.

Resulta especialmente ventajoso también, si en la parte superior, o sea, la parte exterior del nervio doble, existe respectivamente un ensanchamiento en forma de acanaladura que discurre a ambos lados en la dirección longitudinal del nervio y que forma conjuntamente una acanaladura doble en dirección longitudinal y, por tanto, una cabeza de nervio. Los clavos sobresalen de las superficies laterales de esta cabeza de nervio hueca en el interior. De este modo se puede obtener una anchura mayor del nervio y, por consiguiente, una distancia mayor entre los tablones. Es posible lograr así que en caso de un espesor del material de sólo 1,5 mm aproximadamente, la anchura de la cabeza del nervio ascienda a 5 mm o básicamente más, en dependencia del dimensionamiento de las acanaladuras. Esta realización se puede aplicar naturalmente tanto en grapas soldadas a partir de dos piezas como en grapas conformadas de una sola
pieza.

A tal efecto, el nervio, que soporta en su parte superior la cabeza de nervio, puede tener un pie cerrado de nervio, es decir, las dos chapas del nervio hacen contacto completamente entre sí. El pie del nervio puede estar configurado también de forma abierta, estando separadas entre sí las chapas con un orificio de al menos 0,5 mm. Aparte de la buena circulación del aire, lograda de este modo, también a través del nervio, se obtiene mediante el pie abierto del nervio una elasticidad óptima de la grapa que actúa muy positivamente en procesos de contracción o hinchamiento de la madera, ya que en este caso, por decirlo así, la grapa coopera, se comprime elásticamente o se estira.

Como podría haber problemas al clavar esta grapa de elasticidad transversal debido a la presencia de la cabeza hueca de nervio y el pie abierto de nervio, resulta ventajoso, si casi a la altura del clavo respectivamente, en la pared contraria de la cabeza del nervio, está previsto un orificio para introducir una herramienta de impacto o contrasoporte. Por tanto, a través de este orificio es posible apoyarse o actuar en el lado interior de la pared, de la que sobresale el clavo.

Otra ventaja radica en que las placas angulares tienen básicamente una anchura mayor que la longitud de los clavos, preferentemente el doble de tamaño o anchura, de modo que las placas angulares sobresalen ampliamente en sentido horizontal debajo de los clavos. Independientemente de la buena estabilidad de la grapa, lograda de esta forma, y de la buena absorción de la presión debido a la carga de los tablones, el tablón se puede colocar sobre el extremo libre de la placa angular, situado detrás del clavo, de modo que éste forma tanto un apoyo como una vía deslizante para el tablón.

Las placas angulares tienen aquí la misma longitud que el nervio doble, ya que la grapa se fabrica en general mediante el doblado de una tira rectangular de chapa. Las placas angulares pueden tener también, sin embargo, sólo la mitad de la longitud del nervio doble, estando desplazadas las dos semiplacas en la longitud media del nervio, o sea, deberán estar dispuestas de forma alterna, sobresaliendo del nervio. Estas semiplacas tienen en primer lugar la ventaja de permitir un ahorro de material y resulta evidente que para acceder mejor al orificio roscado de la placa, los clavos estén dispuestos respectivamente en la otra mitad del nervio.

Es especialmente ventajoso también, si en las placas angulares respectivamente está previsto al menos un resalto que sobresale en dirección a los clavos, tiene forma de una acanaladura, que discurre en la dirección de la extensión de la anchura, y una sección transversal en forma de arco o cubierta. Estos sirven en primer lugar para elevar la superficie de apoyo de las placas angulares, ya que los tablones descansan en la superficie de estas acanaladuras. En dependencia de la altura de estas acanaladuras de separación o apoyo se puede influir también en la separación de los tablones respecto al subsuelo y lograr una circulación óptima del aire. En este caso es posible obtener un apoyo especialmente bueno y seguro de los tablones sobre las placas angulares, si están previstas dos acanaladuras en paralelo, a todo lo ancho, de forma contigua respectivamente al borde lateral exterior de las placas angulares. Esto permite la colocación del orificio de sujeción en el centro, entre las dos acanaladuras.

El orificio para el tornillo de sujeción está configurado ventajosamente de modo que el ángulo de avellanado en la placa angular es mayor que el ángulo de la cabeza del tornillo. Esto provoca que en caso de dilatarse o contraerse el tablón se evite un posicionamiento oblicuo de la cabeza del tornillo y, por tanto, una posible rotura del tornillo. Es ventajoso, además, si los orificios de sujeción están configurados como orificios longitudinales que discurren transversalmente, mediante lo que es posible realizar sin dificultad un trabajo en los tableros, condicionado por la intemperie (hinchamiento o contracción), a través de los tornillos.

Según una variante de la invención, se logra una protección ventajosa contra torsiones, si mediante las placas angulares se crea una unión por arrastre de forma con el subsuelo, a saber, si en las placas angulares está conformado o doblado al menos un borde de cuchilla en forma de garra que sobresale hacia abajo. Estos pueden estar previstos en ambos cantos laterales de las placas angulares, al menos en el extremo delantero frontal o lateral y con una longitud de al menos una sexta parte de la anchura de la placa. Al apretarse los tornillos de sujeción, estos bordes de cuchilla, que sobresalen de las placas angulares hacia abajo, se embuten en la madera. En caso de que la entrada en la madera por el lado de la placa, opuesto al tornillo, no sea completa, por ejemplo, en maderas muy duras, resulta suficiente golpear o pisar desde arriba para completar también aquí la unión por arrastre de forma. Para posibilitar un encaje especialmente bueno, puede estar prevista también una entalladura rectangular en forma de U en el centro, respecto a la extensión longitudinal de las placas angulares, estando doblados hacia abajo los cantos laterales, como bordes de cuchilla en forma de garra, que discurren a lo ancho de la placa.

Asimismo, es ventajoso, si en los lados longitudinales de las placas angulares están previstos chaflanes de entrada que comprenden también los extremos correspondientes, dado el caso, de las acanaladuras. Mediante la conformación de un chaflán de empuje en los extremos de las placas angulares, en paralelo al nervio, se pueden desplazar sin esfuerzo los tablones pesados sobre la placa angular doble para ser montados a continuación.

Resulta ventajoso también, si los dos perfiles en L, que forman la grapa, son perfiles individuales que están unidos entre sí o se pueden unir de modo que permitan un desplazamiento transversal, al menos insignificante, de ambos perfiles entre sí, pero no en dirección longitudinal. Esto posibilita que en estado montado, los dos perfiles se puedan mover respectivamente con el tablón, en el que están clavados, o sea, participan en los movimientos de contracción transversal o de hinchamiento de los tablones. Sin embargo, estos quedan unidos entre sí a la vez mediante al menos un elemento de guía transversal con posibilidad de desplazamiento transversal, pero no en sentido longitudinal ni en altura. Si en las placas angulares están previstos, además, como taladros de sujeción orificios longitudinales de extensión transversal, está garantizada una cooperación óptima de las grapas con los tablones.

Como elementos de guía transversal están previstas lengüetas de guía, cortadas hacia fuera a partir de los nervios perfilados, alineadas simultáneamente con las placas angulares y con una posible forma rectangular, mientras que como orificios de guía, que cooperan con éstas, están previstas acanaladuras de guía o recortes de guía, realizados en los lados inferiores del nervio y en las placas angulares de modo que se abren o extienden en sentido transversal.

Las acanaladuras de guía pueden ser aquí ventajosamente a la vez las acanaladuras de separación descritas antes, con la realización configurada de forma abierta hacia el lado interior del nervio y en correspondencia adecuada con las dimensiones de las lengüetas y formando a la vez un túnel transversal para una ventilación óptima. En este sentido también se ha de prever y considerar de un modo conveniente o ventajoso una simetría central de la grapa, o sea, colocar los clavos respectivamente en el centro y alineados entre sí y los elementos de guía, fuera del centro, por lo que existen perfiles idénticos de grapas. En caso de un giro o cambio de posición de 180º de la grapa se disponen de lados de grapa con una configuración siempre igual y no hay que pensar en general cuál es el lado izquierdo o derecho de la grapa para unirla correctamente con el tablón, pues ambos lados son preferentemente idénticos.

Se puede prever naturalmente también una disposición central de los elementos de guía y una disposición descentrada de los clavos. Esto condiciona, sin embargo, la existencia de diferentes elementos perfilados de una grapa, ya que, por ejemplo, un lado perfilado presenta la lengüeta central y el otro lado, el recorte central de guía.

Por último, en las superficies superiores de apoyo de las placas angulares o de sus acanaladuras de guía y/o apoyo puede estar prevista al menos una muesca o curvatura respectivamente en forma de un clavo que asciende inclinado en dirección al nervio vertical, preferentemente con una simetría central. Éstas sirven para bloquear el clavo contra su salida de los tablones. Estos salientes en forma de clavo están configurados aquí de modo que sus lados superiores centrales ascienden en dirección al nervio o discurren en paralelo a la superficie de las placas angulares o de las acanaladuras, mientras que los lados inferiores o los cantos cortantes laterales del clavo que discurren, por lo general, de forma inclinada o las superficies cortantes ensanchan los clavos de forma cónica hacia el nervio.

Para finalizar es necesario señalar que la invención resuelve situaciones u objetivos contradictorios, a saber, la contradicción entre la fabricación económica (= material delgado), distancias grandes (= material grueso), alta resistencia del clavo (= material grueso y ancho) y ninguna astilla (= clavos largos y delgados) y todo esto debido a las configuraciones especiales de los elementos de la grapa. Resumiendo son los siguientes:

-: moldeado a partir de una tira delgada de chapa de un angular doble con un nervio doble,

-: estampado de acanaladuras para crear elementos de separación tanto en el nervio (cabeza de nervio/separación de los tablones) como en las placas angulares (separación de apoyo), eventualmente con pie de nervio abierto,

-: geometría especial de los clavos, o sea, longitud aproximada con el doble del tamaño de la separación entre tablones, con curvatura transversal en forma de acanaladura, canto cortante espacialmente cónico, recortado a partir de la pared del nervio en sentido horizontal o vertical,

-: bordes de cuchilla que sobresalen por el lado inferior de las placas angulares,

-: orificios de sujeción con un ángulo de avellanado mayor que el ángulo de la cabeza del tornillo, eventualmente como orificios longitudinales transversales,

-: conformación de un chaflán de empuje en los extremos de las placas angulares como elemento auxiliar de empuje para los tablones,

-: placas angulares con una anchura de casi el doble de la longitud de los clavos y

-: separación completa de los angulares dobles.

Breve descripción del dibujo

Muestran:

Fig. 1 una vista en perspectiva de una grapa de sujeción en una realización con perfiles en L, soldados entre sí, y clavos, recortados hacia fuera en sentido horizontal,

Fig. 2 una vista en perspectiva de la grapa según la figura 1, en una realización con orificios longitudinales de sujeción,

Fig. 3 una vista esquemática de varias grapas de sujeción en estado montado con tablones sobre un subsuelo,

Fig. 4 una vista en perspectiva de una grapa de sujeción en una realización con nervio doble plegado y clavos recortados hacia fuera en vertical,

Fig. 5 una vista similar a la de la figura 4, pero con semiplacas angulares dispuestas de forma alterna,

Fig. 6 una vista en planta desde arriba de un recorte de chapa para la grapa de sujeción según la figura 5,

Fig. 7 una vista en perspectiva de una grapa de sujeción en una realización con acanaladuras de separación,

Fig. 8 una vista en planta desde arriba de un clavo según la flecha VIII de la figura 7,

Fig. 9 una vista en planta desde arriba similar a la de la figura 9, pero con forma redondeada de los flancos,

Fig. 10 un corte axial X-X de la figura 8 a través del clavo,

Fig. 11 una vista lateral según la flecha XI de la figura 9,

Fig. 12 un corte a través de la punta del clavo según las líneas XII-XII de la figura 8,

Fig. 13 una vista delantera del clavo según la flecha XIII de la figura 7,

Fig. 14 un corte cerca de la base del clavo según las líneas XIV-XIV de la figura 8,

Fig. 15 un corte según las líneas XV-XV de la figura 7 que muestra el avellanado del orificio de sujeción,

Fig. 16 un corte según las líneas XVI-XVI de la figura 7 a través de una acanaladura de apoyo con chaflán,

Fig. 17 un corte según las líneas XVII-XVII de la figura 7 que muestra la disposición del borde de cuchilla en un canto frontal de la placa angular,

Fig. 18 un corte XVIII-XVIII de la figura 7 que muestra el conformado central de cantos de cuchilla,

Fig. 19 un corte transversal a través de una grapa en una realización similar a la de la figura 7, pero con pie abierto de nervio y herramienta de contrasoporte,

Fig. 20 un corte a través de una realización similar a la de la figura 19 con nervio abierto y más ancho, así como herramienta estrecha de contrasoporte o impacto,

Fig. 21 una vista en perspectiva de la grapa en una quinta realización con dos elementos perfilados, desplazables en sentido transversal, en estado desplazado conjuntamente,

Fig. 22 una vista como en la figura 21 con perfiles separados y

Fig. 23 un corte XXIII-XXIII a través de la grapa según la figura 21 con tablones colocados.

Vías para la realización de la invención

En el caso de la forma de realización, representada en la figura 1, se trata de una grapa 1 de sujeción, compuesta de dos perfiles 2, 2’ en L, estando unidos ambos perfiles entre sí de forma contigua por sus lados verticales 3, 3’ mediante una costura 4 de soldadura para crear un perfil en T. Los lados verticales soldados 3, 3’ forman aquí un nervio vertical 5 con una estabilidad especial debido al espesor doble del material. Los segundos lados de los perfiles 2, 2’ en L respectivamente están alineados uno respecto a otro y forman en cada caso placas angulares 8, 8’ que se alejan del nervio 5 en sentido horizontal y mediante las que la grapa se apoya sobre un subsuelo no representado aquí. En estas placas angulares 8, 8’ está previsto respectivamente un orificio 9, 9’ de sujeción para un tornillo de sujeción, no representado, con cabeza avellanada de forma cónica. En los lados respectivos del nervio vertical, está recortado hacia fuera en sentido horizontal un clavo 6 ó 6’, dirigido en vertical en cada caso, cuyos lomos 16 están orientados en vertical a partir del nervio y simultáneamente en paralelo a las placas angulares 8, 8’. Se puede observar, además, que la longitud de los clavos 6, 6’ asciende aproximadamente sólo a la mitad de la anchura de las placas angulares 8, 8’. Asimismo, se puede apreciar que los clavos 6 y 6’ están configurados de modo que el material doble, que forma el nervio 5, no está perforado a ambos lados en ningún lugar. La forma de la abertura para el embutido a la inversa de los clavos está configurada aquí de modo que los clavos se pueden llevar nuevamente a esta abertura, por ejemplo, mediante el golpe de un martillo. Esto es ventajoso para el montaje del primer y último tablón, ya que se evita así un riesgo de lesión debido a los clavos sobresalientes.

En el caso del ejemplo de realización, representado en la figura 2, se puede observar que se trata básicamente de la misma forma de realización de la figura 1, pero los clavos 6 y 6’ están dispuestos simétricamente respecto al nervio y, en vez de los dos orificios 9, 9’ de sujeción dispuestos de forma alterna, están previstos por cada placa angular 8, 8’ dos orificios 9, 9’ de sujeción, configurados como orificios longitudinales que discurren transversalmente, siendo posible así trabajar en los tablones en dirección transversal al subsuelo. Las grapas se montan aquí, de modo que los tornillos se colocan en el centro de los orificios longitudinales en caso de condiciones meteorológicas promedio. Además, la grapa está configurada de modo que está dimensionada con simetría puntual respecto al punto 10 de simetría, situado en el centro respecto al nervio y a toda la grapa simultáneamente, por lo que la grapa ofrece la misma imagen en cada caso al cambiarse de posición en un ángulo de 180º.

La figura 3 muestra tres grapas 1 de sujeción, montadas con tablones 11. En esta representación, la primera grapa se introdujo de derecha a izquierda en el tablón izquierdo 11, sirviendo primero la placa angular izquierda 8 como superficie de apoyo, como elemento distanciador y superficie guía. La fijación del tablón 11 comienza en el momento, en el que el clavo 6 penetra en el tablón y finaliza cuando el tablón ha llegado al nervio 5 o el nervio 5 se sitúa junto al tablón. A continuación, se atornilla la grapa en el subsuelo 13 con el tornillo 12. Es evidente que a lo largo del tablón se montan varias grapas, por ejemplo, separadas a 50 cm respectivamente, y se fijan aquí. Sin embargo, en el presente caso sólo se habla siempre de una grapa. El próximo tablón se introduce entonces por la derecha, sirviendo primero la placa angular derecha 8’ como superficie de apoyo, superficie guía y placa distanciadora y comenzando el arrastre de forma con la entrada del clavo metálico 6’. Éste finaliza, a su vez, cuando el segundo tablón 11 ha llegado al nervio 5, o sea, está situado convenientemente junto a éste. El montaje continúa al insertarse la próxima grapa con la placa angular izquierda por debajo del lado derecho del tablón central e introducirse el clavo izquierdo y así sucesivamente hasta el último tablón que crea el cierre.

La figura 4 muestra una grapa 15 de sujeción que parece a primera vista similar a la grapa 1 de la figura 1. La diferencia aquí radica especialmente en que la grapa 15 no está conformada a partir de dos angulares soldados entre sí, sino a partir de una tira continua de metal para crear un perfil en T. Además, los clavos 6, 7, 7’ no están cortados en sentido horizontal, sino en vertical, o sea, troquelados y doblados hacia arriba, presentan un lomo 16 o lado superior, vertical y recto, así como curvado en forma de acanaladura abierta hacia abajo, y debido a esta curvatura transversal disponen de una buena rigidez, por lo que a pesar de la gran longitud de los clavos es posible clavarlos en la madera dura. Además, presentan cantos cortantes cónicos 17 o superficies cortantes 17’ que posibilitan en el canto del clavo que la madera no reviente. La forma más exacta del clavo se describe detalladamente a continuación en relación con las demás figuras del dibujo.

La figura 5 muestra una grapa 18 de sujeción, configurada básicamente de forma igual a la grapa 15 de la figura 4, pero no con placas angulares 8, 8’ con su longitud total, sino con la mitad de la longitud que, como todas las configuraciones, están dispuestas en la grapa con simetría respecto al punto central, o sea, desplazadas aquí en la mitad de la longitud.

La figura 6 muestra una vista en planta desde arriba de un recorte 19 de chapa, a partir del que se fabrica la grapa 18 según la figura 5 mediante el doblado/plegado correspondiente de los cantos. Se puede observar que las placas angulares 8, 8’ con la mitad de la longitud, que sobresalen de forma alterna, permiten un ahorro de material en el troquelado de una tira de chapa convenientemente larga, a partir de la que se hacen varios recortes de grapa en la dirección longitudinal de la tira, encajando en cada caso, exactamente por arrastre de forma, la placa del siguiente recorte en el troquelado de una placa.

En el caso del ejemplo de realización, representado en la figura 7, se trata de una grapa 20 de sujeción (cuarta forma de realización) que muestra una forma más compleja de la grapa 15 según la figura 4. En comparación con ésta, en la parte superior del nervio 5 están previstos acanaladuras 21 y 22, ensanchadas en sentido transversal hacia ambos lados, que crean conjuntamente una cabeza hueca 23 de nervio. En el extremo inferior del nervio, los dos elementos planos de chapa están previstos sin separación alguna y apoyados a ras uno contra otro, formando un pie 24 de nervio sin separación. Hay que señalar, además, que los clavos 7, 7’ están cortados en sentido vertical hacia fuera a partir de las paredes del nervio de modo que sobresalen del pie 24 de nervio en vertical y en paralelo, simultáneamente, a las placas angulares 8, 8’, por lo que las bases 25 de los clavos se encuentran en los flancos/acanaladuras de la cabeza del nervio.

Asimismo, en la superficie frontal delantera de la grapa 20 se puede observar que en caso de un espesor 27 de chapa, relativamente pequeño, de 1,5 mm aproximadamente, la anchura de la cabeza del nervio puede ser de 5 mm, o sea, puede presentar la distancia mínima óptima entre los tablones. En las placas angulares 8, 8’ se han realizado en cada caso dos acanaladuras 28 de apoyo y separación con una sección transversal en U. Las dos acanaladuras 28 de apoyo discurren aquí en paralelo entre sí y están separadas una de otra de modo que en el centro de ambas existe un orificio 9 de sujeción. Debajo de las acanaladuras 28 de apoyo están configurados canales 29, a través de los que se optimiza la ventilación del subsuelo. Por último, en los extremos frontales exteriores de las placas angulares 8, 8’ está previsto en cada caso un borde 30 de cuchilla que está configurado mediante el moldeado hacia abajo de las zonas de estos cantos y que en estado montado engranan en el subsuelo, según se puede observar especialmente en la figura 17. Además, en los cantos longitudinales exteriores de las placas angulares 8, 8’ está prevista en el centro una entalladura rectangular 31, 31’ respectivamente que presenta bordes 30 de cuchilla que discurren a lo ancho y que se obtienen mediante el corte correspondiente y el moldeado hacia abajo del material de chapa, según se observa especialmente en la figura 18.

En la figura 7 se puede observar también que en ambos cantos longitudinales de las placas angulares 8, 8’ están previstos chaflanes 34 de empuje, mostrados con mayor exactitud en las figuras 15 y 17.

La figura 8 muestra en una vista en planta desde arriba la forma de un clavo 7 con el lomo 16, central y recto, los cantos cortantes laterales 17 o superficies cortantes 17’ que discurren primero a la altura de la base 25 del clavo paralelamente entre sí para que luego el clavo se estreche de forma cónica y finalice a continuación en una punta redondeada 33.

Una configuración similar presenta también el clavo 7, mostrado en la figura 9, sólo que aquí los flancos 17’ del clavo o los cantos cortantes 17 no terminan en una línea quebrada, sino en un contorno arqueado relativamente uniforme.

En la figura 10 se puede observar cómo a partir de la pared vertical 3’ de un nervio doble 5, el clavo 7 está doblado hacia fuera en vertical, de abajo hacia arriba, y asume una posición exactamente vertical, de modo que el lomo 16 tiene un desarrollo recto y vertical respecto a la pared 3 del nervio. Se puede observar, además, que el lado inferior de la superficie cortante o flanco cortante 17’ está estirado hacia abajo en dirección a la pared, por lo que se logra una anchura mayor en la zona de la base del clavo y, por tanto, una alta rigidez del clavo en general, según muestra también la figura 11, en la que se puede ver convenientemente, asimismo, el ensanchamiento curvado y estirado hacia abajo del clavo.

Las figuras 12, 13 y 14 muestran el clavo 7 en cortes y vistas diferentes y se puede observar en cada caso la forma de canal, contorneada y abierta hacia abajo con lomo recto 16 del clavo, los cantos cortantes laterales 17 o flancos cortantes 17’, que terminan de forma cónica, es decir, puntiaguda, y la punta 33 de clavo. Mediante el aumento del ángulo \alpha en la figura 12 al ángulo \beta de la figura 14, y la torsión de los flancos cortantes 17’ de s en la punta del clavo a s’ en la base del clavo, así como la desviación de los flancos cortantes desde el lomo del clavo en el valor "x" (figura 14), se crean superficies torcidas a partir de los cantos o flancos de chapa.

En la figura 15 se puede observar que los orificios 9 de sujeción en las placas angulares 8 están configurados de modo que su ángulo de avellanado es mayor que el ángulo de la cabeza de tornillo del tornillo avellanado 12, con lo que se evita una posición inclinada de la cabeza del tornillo durante los trabajos en el tablón en dependencia de las condiciones meteorológicas, y, por tanto, su rotura.

En la figura 16 se puede observar que con las acanaladuras 28 se logra una superficie de apoyo especialmente alta para los tablones en las placas angulares 8, 8’, que hay un canal 29 de ventilación y que mediante los chaflanes 34 de empuje es posible un desplazamiento significativamente más fácil de los tablones sobre las superficies o acanaladuras de apoyo de las placas.

La figura 17 muestra cómo en un lado de la placa angular, configurada, por una parte, con una acanaladura 28, que crea debajo un canal 29 de ventilación, el canto exterior o frontal está presionado o deformado hacia abajo de tal modo que existe un borde 30 de cuchilla que visto en corte se asemeja a una garra y que penetra en el subsuelo mediante una presión vertical correspondiente.

La figura 18 muestra el corte 31 en las placas angulares 8, 8’, cuyos cantos transversales están moldeados hacia abajo de modo que aquí también están configurados bordes 30 de cuchilla que penetran, asimismo, en el subsuelo en forma de garra.

La figura 19 muestra una grapa 35 (quinta realización) en corte transversal, estando configurada esta grapa básicamente como la grapa 20 de la figura 7, sólo que aquí el pie 24 del nervio está abierto y los clavos 7, 7’ están orientados centralmente en el nervio, es decir, alineados entre sí. El orificio 36 del pie del nervio asciende como mínimo a 0,5 mm aproximadamente, de modo que este orificio crea junto con la cavidad de la cabeza 23 del nervio un canal de ventilación, a través del que se pueden ventilar de forma óptima los tablones y el subsuelo de los tablones. Como mediante la cabeza hueca de nervio y el orificio 36 se crea, además, una elasticidad transversal de la grapa, que no permite la fijación óptima de la grapa en un tablón, está previsto un orificio 37 en la pared contraria 14 dispuesta hacia el clavo 7 de fijación. A través de éste pasa un vástago de una herramienta 38 de impacto de modo que su superficie frontal se coloca y apoya en el lado trasero de la pared, por la que sobresale el clavo 7 a fijar, o transmite directamente la fuerza de impacto al clavo 7 a través de la pared. Se puede observar que en caso de una disposición central de ambos clavos 7, 7’, o sea, con una orientación alineada entre sí, la herramienta 38, por una parte, engrana por debajo en un clavo 7’ mediante el vástago 39 y, por la otra parte, tiene frontalmente una entalladura 40, en la que entra el clavo 7’.

Además, la figura 20 muestra una configuración similar a la de la figura 19, sólo que aquí el nervio 5 está muy abierto, o sea, tiene una gran anchura 26 de la cabeza del nervio y un gran orificio 36 del pie del nervio. Como en la forma de realización, representada aquí, no hay una alineación central de los clavos 7, 7’, sino una realización desplazada en dirección longitudinal, según la descripción anterior y la representación (simetría del punto), el orificio 37 puede estar realizado también a la misma altura del clavo 7, de modo que la herramienta 38 de impacto con su vástago 39 actúe exactamente en la base 25 de clavo del clavo 7, apoyándose en éste o clavándolo.

En la figura 21, como quinta forma de realización de la invención, se puede observar una grapa 42 de sujeción que, al igual que las realizaciones de grapas descritas antes, está compuesta de dos perfiles en L y tiene, asimismo, una simetría central, de modo que también aquí se puede comenzar el montaje por el lado izquierdo o derecho. La particularidad de esta forma de realización radica en que los dos perfiles en L ya no están unidos fijamente entre sí, sino que son sólo perfiles individuales sueltos que encajan uno en otro por pares y por arrastre de forma para crear una unidad de grapa. Los dos perfiles 2, 2’ idénticos de la grapa tienen en el centro, en los lados verticales 3, 3’, que forman el nervio doble 5 en el estado montado según la representación de la figura 21, respectivamente un clavo 7, 7’ que está dispuesto, por tanto, alineado entre sí en dirección transversal y cuya configuración ya se describió en detalle con anterioridad. En los lados 3, 3’ del perfil, que forman las paredes del nervio, también pueden estar previstas acanaladuras longitudinales que crean una cabeza de nervio para la colocación diversa del nervio doble 5 que se forma en estado montado. Se puede observar que en las placas angulares 8, 8’ están previstas acanaladuras 28, 28’ de apoyo y acanaladuras 43, 43’ de guía. En las acanaladuras de guía, abiertas al menos en el espesor de la placa hacia el interior de los lados, entra una lengüeta 44, 44’ de guía respectivamente en sentido horizontal y mediante desplazamiento transversal, según se puede observar con mayor claridad en la figura 23. Las lengüetas de guía están configuradas mediante recorte y dobladas en 90º hasta quedar alineadas con las respectivas placas angulares. Las placas angulares 8, 8’ presentan también en cada caso un orificio 9, 9’ de sujeción que puede estar configurado, asimismo, como orificio longitudinal transversal. Además, en las acanaladuras 28 y 43 está prevista en cada caso una muesca o curvatura 47, 47’, sobresaliente en vertical, que sirve para aumentar la resistencia a la extracción de los tablones en estado montado. El lado superior de las muescas está configurado con una elevación inclinada en dirección a los lados verticales 3, 3’, pero también puede estar configurado en paralelo a la superficie de apoyo y ensancharse de forma cónica hacia los lados verticales. En cada perfil angular están previstos dos clavos de entalladura, a saber, en disposición simétrica respecto al clavo 7, 7'.

La figura 22 muestra la grapa 42 de sujeción de la figura 21, pero en un estado separado en dirección transversal de los perfiles angulares 2, 2’ que forman la grapa. Aquí se puede observar con especial claridad el conformado de las lengüetas 44, 44’ de guía mediante el corte y el doblado en dirección contraria a la respectiva placa angular 8, 8’. Además, no se dispone como segundos elementos de guía, que cooperan con las lengüetas de guía, de acanaladuras de guía como en la figura 21, sino de simples recortes rectangulares 45, 45’ de guía. Se observa en general que los dos perfiles angulares 2, 2’ son idénticos, lo que es muy ventajoso tanto para la fabricación como para el montaje. Además, en las lengüetas 44, 44’ hay respectivamente un orificio 46, 46’ de sujeción que permite también el uso de los perfiles angulares como piezas iniciales o finales. En las placas angulares 8, 8’ están previstas también muescas 47, 47’, a saber, básicamente en el centro, debajo del clavo 7, 7’.

Por último, la figura 23 muestra una grapa montada 42, colocada sobre un subsuelo, con tablones 11, 11’. Se puede observar cómo los tablones 11, 11’ con clavos embutidos 7, 7’ descansan sobre las acanaladuras 43 ó 28 y los clavos 47, 47’ de entalladura están introducidos a presión en el lado inferior de los tablones. La lengüeta guía 44 del perfil angular derecho 2’ penetra en este caso en el orificio de guía de la acanaladura 43 de guía del perfil angular izquierdo 2.

Durante el montaje, los dos perfiles angulares 2, 2’ se insertan uno en otro mediante las lengüetas de guía y se montan como unidad. A tal efecto, se apoya un cuerpo de presión en la cara interior del nervio, formado por los dos lados verticales 2, 2’ y descubierto en la posición del clavo, y se monta con el martillo o una herramienta de impacto. Hasta cierto punto, es posible realizar el montaje tanto de derecha a izquierda como de izquierda a derecha. Después de meterse a presión un perfil angular 2, 2’, se fija la segunda placa angular en el subsuelo 13, por ejemplo, con un tornillo 12. A continuación, se coloca el próximo tablón en el clavo libre y se clava o mete a presión. Se repite entonces la operación.

Si se produce, por ejemplo, una merma en el tablón, los elementos guías se desplazan uno respecto a otro, o sea, las lengüetas guías en los recortes de guía o acanaladuras de guía. Los lados verticales de los perfiles angulares se mantienen unidos fijamente con los tablones debido a los clavos introducidos y su resistencia a la extracción. En la figura 23 se puede observar también que la distancia de los tablones entre sí y respecto al subsuelo se puede llevar a la medida requerida teniendo en cuenta el espesor del material y las acanaladuras conformadas.

Aplicabilidad industrial

El objeto de la invención se puede aplicar industrialmente en el sector de la construcción para unir elementos constructivos de madera entre sí y a un subsuelo, especialmente tablones de recubrimientos de balcón y terrazas al aire libre, o vigas.

Lista de referencias

\dotable{\tabskip\tabcolsep#\hfil\+#\hfil\tabskip0ptplus1fil\dddarstrut\cr}{
 1         \+ Grapa de sujeción, primera realización\cr  2, 2’      
  \+ Perfiles en L\cr  3, 3’         \+ Lado vertical\cr  4        
\+ Costura de soldadura\cr  5         \+ Nervio\cr  6, 6’         \+
Clavo, horizontal\cr  7, 7’         \+ Clavo, vertical\cr  8, 8’    
    \+ Placa angular\cr  9, 9’         \+ Orificio de sujeción\cr 
10        \+ Punto de simetría\cr  11        \+ Tablones\cr  12     
  \+ Tornillos\cr  13        \+ Subsuelo\cr  14        \+ -\cr  15  
     \+ Grapa de sujeción, segunda realización\cr  16        \+
Lomo\cr  17        \+ Cantos cortantes\cr  17’       \+
Superficie/flanco cortante\cr  18        \+ Grapa de sujeción,
tercera realización\cr  19        \+ Recorte de chapa\cr  20       
\+ Grapa de sujeción, cuarta realización\cr  21        \+
Acanaladura\cr  22        \+ Acanaladura\cr  23        \+ Cabeza de
nervio\cr  24        \+ Pie de nervio\cr  25        \+ Base del
clavo\cr  26        \+ Cabeza ancha de nervio\cr  27        \+
Espesor de chapa\cr  28, 28’   \+ Acanaladuras de apoyo\cr  29      
 \+ Canal\cr  30        \+ Borde de cuchilla\cr  31, 31’   \+
Entalladura\cr  32        \+ -\cr  33        \+ Punta del clavo\cr 
34        \+ Chaflán de empuje\cr  35        \+ Grapa de sujeción,
quinta realización\cr  36        \+ Orificio del pie del nervio\cr 
37        \+ Orificio de entrada\cr  38        \+ Herramienta de
impacto\cr  39        \+ Vástago\cr  40        \+ Entalladura\cr  41
       \+ -\cr  42        \+ Grapa de sujeción, quinta
realización\cr  43        \+ Acanaladura de guía\cr  44        \+
Lengüeta de guía\cr  45        \+ Recorte de guía\cr  46, 47’   \+
Taladro de sujeción\cr  47, 47’   \+
Muesca/curvatura\cr}

Claims

1. Grapa de sujeción para unir elementos constructivos de madera entre sí y a un subsuelo, en especial tablones de recubrimientos de balcón y terraza, preferentemente al aire libre, con

-: un nervio vertical (5),

-: al menos un clavo (6, 6’, 7, 7’) afilado en forma de lengüeta que sobresale respectivamente en vertical/horizontal en la parte superior, a ambos lados del nervio,

-: así como placas angulares (8, 8’) que sobresalen en vertical/horizontal en la parte inferior, a ambos lados del nervio, caracterizada porque

-: la grapa (1, 15, 18, 20, 35, 42) de sujeción es un angular doble compuesto de dos perfiles en L (2, 2’),

-: el nervio (5) es un nervio doble compuesto de dos lados perfilados (3, 3’),

y en al menos una de las dos placas angulares (8, 8’) está previsto al menos un taladro (9, 9’) de sujeción.

2. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque los dos perfiles en L (2, 2’) de la grapa (1) están unidos con sus lados verticales (3, 3’) de forma plana entre sí, para crear un perfil horizontal en T mediante soldadura, remachado o machihembrado.

3. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque la grapa (15, 18, 20, 35) está conformada como perfil en T a partir de una tira continua de chapa mediante la técnica de doblado.

4. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque los clavos en forma de lengüeta (6, 6’, 7, 7’) están dispuestos cerca del extremo superior del nervio y cortados a partir de la pared (3, 3’) del nervio, así como doblados hacia fuera en vertical a ésta.

5. Grapa de sujeción según la reivindicación 4, caracterizada porque en cada lado del nervio hay un clavo (6, 6’ ó 7, 7’), estando dispuestos estos en cada caso en el centro o desplazados entre sí respecto al centro (10) de la extensión longitudinal del nervio (5), o sea, con simetría central.

6. Grapa de sujeción según la reivindicación 4, caracterizada porque los clavos (6, 6’, 7, 7’) están cortados hacia fuera horizontal o verticalmente, es decir, en paralelo o vertical respecto a las placas angulares (8, 8’), a partir de las paredes (3, 3’) del nervio.

7. Grapa de sujeción según la reivindicación 4, caracterizada porque los clavos (6, 6’, 7, 7’) están configurados en forma de canal o arco y también curvados incluso en la base (25) del clavo, estrechándose estos hacia la punta (33) de forma similar a un pico recto de un pájaro, con un pequeño radio en la punta (33), experimentando los cantos laterales o cortantes (17) o las respectivas superficies cortantes (17’), situadas entre estos, un contorneado espacial o torsión respecto a la vertical de 45º aproximadamente en la base del clavo a 0º en la punta (33) del clavo.

8. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque en la parte superior exterior del nervio doble (5) está previsto respectivamente un ensanchamiento transversal en forma de una acanaladura (21, 22) que discurre a ambos lados en dirección longitudinal y que forma conjuntamente una acanaladura doble hueca y, por tanto, una cabeza (23) del nervio, del que sobresalen los clavos (6, 6’, 7, 7’).

9. Grapa de sujeción según la reivindicación 8, caracterizada porque en caso de un espesor del material de 1,5 mm aproximadamente, la anchura (26) de la cabeza (23) del nervio asciende como mínimo a 5 mm.

10. Grapa de sujeción según la reivindicación 8, caracterizada porque el nervio (5) está cerrado, es decir, las chapas del nervio están en contacto entre sí, o abierto, es decir, las chapas están separadas una de otra con un orificio (36) de 0,5 mm como mínimo, formando un pie abierto (24) del nervio.

11. Grapa de sujeción según la reivindicación 10, caracterizada porque los clavos (7, 7’), al menos las bases (25) de los clavos, están dispuestos en la cabeza (23) del nervio y está previsto un orificio (37) para introducir una herramienta (38) de impacto, en la pared contraria a la pared de la cabeza del nervio que soporta el clavo.

12. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque la anchura de las placas angulares (8, 8’) es mayor que la longitud de los clavos (6, 6’, 7, 7’), preferentemente casi el doble de su longitud.

13. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque las placas angulares (8, 8’) presentan la misma longitud del nervio doble (5) o sólo la mitad de la longitud del nervio doble, estando desplazadas las dos semiplacas en la mitad de la longitud del nervio, pero dispuestas entre sí, sobresaliendo de forma alterna, con simetría respecto al punto
central.

14. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque en las placas angulares (8, 8’) está prevista al menos un resalto, configurado hacia arriba en dirección a los clavos, en forma de una acanaladura (28) de apoyo que se extiende en la dirección transversal o la extensión de la anchura de la placa, pudiendo presentar las acanaladuras una sección transversal en forma de arco, de cubierta o en U.

15. Grapa de sujeción según la reivindicación 14, caracterizada porque en cada placa angular (8, 8’) están previstas dos acanaladuras (28), separadas en paralelo entre sí, y en el centro de éstas se encuentra el taladro (9, 9’) de sujeción.

16. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque el taladro (9, 9’) de sujeción está avellanado de forma cónica para alojar al menos parcialmente la cabeza cónica de un tornillo avellanado (12) y el ángulo de avellanado es mayor que el ángulo de la cabeza del tornillo.

17. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque los taladros (9, 9’) de sujeción son orificios longitudinales que se extienden en dirección transversal.

18. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque en los extremos longitudinales de las placas angulares (8, 8’), en la dirección de colocación de los tablones, están previstos chaflanes (34) de entrada que comprenden también los extremos correspondientes de las acanaladuras (28).

19. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque en las placas angulares (8, 8’) está conformado o doblado hacia fuera un borde (30) de cuchilla en forma de garra que está proyectado hacia abajo.

20. Grapa de sujeción según la reivindicación 19, caracterizada porque los bordes (30) de cuchilla están previstos en ambos cantos laterales de las placas angulares (8, 8’), estando dispuestos aquí al menos en el extremo delantero y en una longitud de al menos una sexta parte de la anchura de la placa.

21. Grapa de sujeción según la reivindicación 19, caracterizada porque en la zona central de las placas angulares (8, 8’) está prevista en cada caso una entalladura rectangular (31), básicamente en U, con la profundidad de una fracción de la anchura de las placas, estando moldeados hacia abajo los cantos laterales, que discurren en la extensión transversal de las placas, como bordes (30) de cuchilla en forma de garra.

22. Grapa de sujeción según la reivindicación 1, caracterizada porque la grapa (42) está formada por dos perfiles en L (2, 2’), sueltos e individuales, que se pueden encajar uno en otro o unir entre sí de modo que es posible al menos un desplazamiento insignificante de los perfiles entre sí en dirección transversal, pero no en dirección longitudinal, debido al engranaje por arrastre de forma de los perfiles.

23. Grapa de sujeción según la reivindicación 22, caracterizada porque para el engranaje por arrastre de forma de ambos perfiles (2, 2’) de grapa están previstos en estos elementos (43, 44, 45) de guía transversal, compuestos, por una parte, de una lengüeta (44) de guía que sobresale del nervio (3, 3’) y, por la otra parte, de un orificio (43 ó 45) de guía, previsto en el perfil contrario y alineado con ésta.

24. Grapa de sujeción según la reivindicación 23, caracterizada porque las lengüetas (44) de guía están cortadas hacia fuera a partir del nervio perfilado (3, 3’) y son rectángulos configurados de modo que sobresalen respecto a éste en vertical y alineadas simultáneamente con las placas angulares, mientras que los orificios de guía son recortes (45), que penetran convenientemente en sentido transversal a través de los nervios y en las placas angulares, o acanaladuras (43) de guía.

25. Grapa de sujeción según la reivindicación 23 y al menos una de las reivindicaciones precedentes, caracterizada porque el clavo (7, 7’), previsto en cada perfil (2, 2’), está dispuesto centralmente en el lado perfilado, mientras que los elementos de guía están previstos convenientemente de forma desplazada respecto al centro.

26. Grapa de sujeción según la reivindicación 24, caracterizada porque en las superficies de apoyo de los tablones de las placas angulares (8, 8’) o acanaladuras (43, 45) sobresale hacia arriba al menos una curvatura o muesca (46, 46’) en dirección vertical en forma de un clavo, presentando éstas una inclinación en dirección al nervio o estando su lado superior en paralelo respecto a la superficie de las placas o las acanaladuras y ensanchándose su lado inferior de forma cónica en la misma dirección.